¿Vale la pena exponer mis datos?
Por Gisela Jiménez García

Redes. Foto: Freepik
El uso de las redes sociales es cada vez más cotidiano en nuestras vidas, las utilizamos para consultar o aprender algo, para entretenernos e informarnos; de hecho, se han convertido en la manera más rápida de comunicarnos; pero, ¿Qué tan peligrosas son?
Al presentar su investigación, “El lado obscuro de las redes sociales”, en la novena sesión del Seminario de redes sociales y entornos digitales, el doctor Carlos Adolfo Piña García, especialista en Ciencias de la Computación, alertó que miles de millones de datos, día a día, segundo a segundo, pasan por Internet y son almacenados, por lo que es necesario dimensionar la importancia de toda esta información y tener conciencia de que cada mensaje que difundimos en estos espacios prevalecerá.
Luego de apuntar que más del 70% de la población total de México se encuentra activa en dichas redes, con un uso hasta por tres horas, 27 minutos, como tiempo promedio diario, por parte de usuarios entre 16 y 64 años, el expositor advirtió que las redes sociales toman ventaja de nuestros datos.

Dr. Carlos Adolfo Piña García. Foto: Juan Carlos Angulo
La invitación de estos medios es sencilla, “sé buen chico y enséñale a mi algoritmo de aprendizaje qué te gusta, para que yo te devuelva únicamente eso”, refirió el doctor Piña, y agregó: por supuesto que también se enteran de qué te molesta, te importa, te disgusta o te entristece, pues vender ese tipo de información es parte de su negocio y de su dinámica completamente invasiva.
Añadió que entre las redes más utilizadas en México están YouTube, Whatsapp Facebook e Instagram, mismas que se nutren de nuestra participación, gustos y preferencias, y donde incluso crean un perfil digital del usuario que se convierte en producto de venta.
Como parte de su funcionamiento también analizan las conversaciones, mensajes, ubicación de las personas y de sus dispositivos móviles, y todas las actividades realizadas les dejan huellas útiles, además de que aprovechan elementos como el reconocimiento facial. Detalló que Tiktok se convirtió en la competencia directa de Facebook, ya que la prefieren los jóvenes por el acceso a información rápida y microvideos de 15 segundos, es decir, a un mundo rápido y efectivo, que resulta muy adictivo.
No obstante, el académico destacó que no se debe culpar de esta situación sólo a las plataformas digitales, pues el usuario tiene corresponsabilidad. Siempre debemos preguntarnos, ¿vale la pena exponer todos mis datos?, pero además, precisó, requerimos detenernos y revisar la configuración de seguridad de nuestras redes sociales, no dar “likes”, recordar que nuestra información no se borra, no tenemos control sobre ello y todo queda guardado. “Tú decides qué compartir”, finalizó.