Etnografía digital, útil en la práctica de campo de la Antropología
Con información de Yaritza Pereyra

Doctor Cesar Villalobos. Fotografía: Karla García| Gaceta Políticas
La práctica de campo en el estudio antropológico representa un pilar fundamental en el proceso de formación académica, la cual se ha detenido a causa de la pandemia, por lo que replantear las estrategias y la metodología de enseñanza se ha convertido en un objetivo imperante en los centros de estudio.
Así lo expresó el doctor César Villalobos, coordinador del Centro de Estudios Antropológicos de la Facultad, en el Encuentro sobre docencia y prácticas de campo, organizado el 4 de noviembre por el Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA) de la UNAM.
Además de plantear las futuras estrategias y retos de esta disciplina, dicho foro también busca impulsar los proyectos de indagación en la materia, razón por la que se contó con la participación de los doctores Guido Munch y Cristina Oehmichen.
Munch abordó el tema de la enseñanza en esta ciencia, y los fundamentos básicos de la etnografía en la misma; la cual refirió como parte del método de investigación y no una técnica, según se le ha clasificado; profundizó en sus funciones e importancia y la catalogó como una forma indispensable para la transmisión del conocimiento.
Por otro lado, expuso la relevancia de los estudios de grupos étnicos y los criterios objetivos, como la cultura, la lengua, la religión, la organización social y la raza. También manifestó el papel que la etnografía tiene en la actualidad, la cual ha cambiado a lo largo de los años, lo mismo que su presencia en diferentes áreas de estudio.
Respecto a las acciones implementadas por el IIA, la doctora Oechmichen platicó acerca de los estudios de etnografía digital como una forma de continuar con el trabajo de campo, sin dejar de lado el papel que la tecnología juega en ello. Dijo que ésta está presente en las actividades que los sujetos de estudio realizan en su día a día, además de que es una herramienta de los investigadores. En este sentido, propuso la integración permanente del espacio digital en las investigaciones etnográficas, y no sólo como acción de respuesta, debido a la imbricación que existe entre lo real y lo digital.
Finalmente, los ponentes aclararon que, si bien el uso de las herramientas tecnológicas facilita y permite continuar con la labor del antropólogo, esto no sustituye el trabajo presencial y lo que éste aporta a la investigación.