Trata de personas, sinónimo de explotación
Por Angélica Martínez Hernández

Foto: Fiscalía General del Estado de Morelos.
“A nivel global, más de 25 millones de personas son víctimas de trata y se encuentran atrapadas en redes de explotación”, así lo afirmó la licenciada Ana Karen Hernández Arrioja, docente de nuestro plantel, en la segunda mesa del Seminario Permanente de Derecho Internacional, organizado por el Centro de Relaciones Internacionales (CRI), en el cual se abordó el tema: “El Derecho Internacional frente a la trata de personas: retos pendientes en México”.
La maestra Ana Margarita Bolaños, ex visitante de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, definió a la trata como la «captación, transporte, traslado, acogida o recepción de personas mediante la amenaza, uso de la fuerza, coacción, rapto, fraude, engaño o abuso de poder, todo con el fin de explotación”. Asimismo, precisó que quienes perpetran estas acciones forman parte de “redes de tráfico organizadas que operan desde todas partes del globo», ya que es un problema mundial; sin embargo, puntualizó, tardó 16 años para que la Convención Interamericana de Derechos Humanos reconociera esta realidad.
Aseveró que la voluntad política es primordial para avanzar en esta materia, y que tanto el gobierno como las empresas deben involucrarse en el asunto, cuyo primer filón es el marco jurídico, después la prevención y la protección a las víctimas, además de garantizarles un trabajo digno, mediante la creación de políticas públicas específicas.
En su intervención, el licenciado Efraín Nieves Hernández, profesor de Derecho Internacional de los Derechos Humanos en la FCPyS, añadió que la trata de personas es un hecho que se consolida en todas partes. Después de asegurar que “en México las leyes van un paso atrás», urgió trabajar en la prevención de este delito, ya que es un lastre que rebasa a las Naciones Unidas, del cual no se escapa ningún país y cada vez se extiende más.

Ana Karen Hernández, Efraín Nieves, Shareni Sayuri Flores, Ana Karen Martínez y Ana Margarita Romero. Foto: Angélica Martínez.
Informó que la Ley para prevenir, sancionar y erradicar los delitos en materia de trata de personas, promulgada en 2012, misma que hasta la fecha nos rige, requiere actualizarse y proponer en ella la protección de la víctima; aún más, dijo, esto es vital porque “nuestro país es un punto estratégico para este crimen, debido a su posición geográfica”.
Luego de apuntar que según la CNDH, en 2023 se enviaron 60 mil 342 escritos de queja, aseguró que la cantidad de delitos en México que no se denuncia es de 92.9 %, y que del 10 % de los que sí se denuncia, sólo en el 7% se empieza una carpeta de investigación, y de ese porcentaje, el 3.5% es el que llega a los jueces. “México es un lugar propicio para la trata de personas», y nos acercamos cada vez más a un Estado fallido, propiciado por la corrupción en el gobierno, resaltó.
Al tomar la palabra, la maestra Ana Karen Ramírez, directora de la Unidad de Peritos Judiciales de la Suprema Corte de Justicia, habló de la obligación de los Estados para investigar este crimen, y de la pertinencia del auxilio de las Ciencias Forenses, ya que mediante éstas se indaga el acto, los medios y el objetivo del delito.
En el mismo tenor, detalló que las penas en este terreno varían, dependiendo del país y su Estado de Derecho, razón por la cual es indispensable entender los daños, visibles a través del peritaje, e identificar los patrones que ayudan a la prevención y sanción de un delito de este tipo.
Hizo hincapié en que el crimen evoluciona, y ejemplificó con un caso en Tailandia, donde se descubrieron campos de ciber esclavos, a quienes obligan a hacerse pasar por mujeres, chatear con hombres en la web y conseguir información. “El crimen es el resultado de una interacción entre las características de las víctimas y los tratantes, pero también de la situación en la que esto se desenvuelve”, finalizó.