Tercer Coloquio de Estudios Críticos sobre Discapacidad
Por Valeria Arévalo

La discapacidad en México. Foto: Desinformémonos.
De acuerdo con el Censo de Población y Vivienda realizado en 2020 por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en México hay más de siete millones de personas con discapacidad, lo que equivale al 5.6% del total de la población nacional, misma que sufre dificultades o insuficiencias de la vista, el oído, motrices, del habla, el lenguaje y psicológicos, entre otros tipos.
Este sector es invisibilizado y discriminado, ya que la sociedad civil no tiene la educación adecuada ante este tema, las infraestructuras no están diseñadas para incluir a estas personas, y hay ausencia de políticas públicas para poner sobre la mesa estos asuntos.
En este contexto se efectuó el Tercer Coloquio de Estudios Críticos sobre Discapacidad, organizado por el Centro de Estudios Sociológicos (CES) e integrado por diversas mesas de diálogo. En la tercera sesión participaron el genetista Iván Jiménez, la psicóloga Isis Libertad Lara, la comunicóloga Marisol Morales, así como Yazmín Delgado y Karina García, trabajadoras sociales en el sistema penitenciario. Al evento fue invitado un grupo de personas con distintos tipos de discapacidad y dos intérpretes de lengua de señas que tradujeron toda la conferencia.

Trabajadoras sociales Karina García y Yazmín Delgado. Foto: Darren García.
Durante su ponencia, Isis Libertad Lara habló sobre el espectro autista en mujeres, que compartió, ella misma tiene. El 80% de las féminas con esta condición son diagnosticadas de manera tardía, a la edad de 18 años en promedio. Esto se debe a que los estudios y pruebas médicas se concretan en pacientes masculinos, y a que “haber creado un estereotipo de cómo se ven las personas con autismo fue un error”, pues las mujeres autistas no presentan las mismas características ni comportamientos que los hombres, por lo que su condición pasa inadvertida.
Por su parte, Marisol Morales, maestra por la FCPyS, presentó su proyecto de investigación de maestría, en el que analizó herramientas digitales cuyo objetivo fue informar sobre temas de salud durante la pandemia, tomando como muestra a personas con discapacidad auditiva, sus familiares e intérpretes, y encontró fallas e insuficiencias en las plataformas. ¿Qué le falta al gobierno para tener éxito en este terreno?, cuestionó la ponente. Educación en lengua de señas, implementar marcos y políticas públicas, difusión de la información y capacitación a los trabajadores, fueron algunas de sus respuestas y propuestas.

Intérprete de lengua de señas en el evento. Foto: Darren García.
Karina García y Yazmín Delgado tuvieron una participación conjunta en la mesa, en la que plantearon que el sistema de salud y el de justicia están muy entrelazados y “son monstruos en temas de discapacidad”. Como trabajadoras del sistema judicial, y por tener acceso al Centro Varonil de Rehabilitación Psicosocial (Cevarespi) y al Centro Femenil de Reinserción Social de Tepepan, resaltaron que hay casos de abuso a personas con discapacidad, ya que no se consideran las diversas condiciones médicas que puede tener alguien que está siendo juzgado. Ante ello, sugirieron ampliar la perspectiva punitiva y buscar alternativas para atender estos casos desde etapas tempranas, a fin de evitar que desencadenen en algo mayúsculo.