Sociología jurídica, nueva práctica para impartir derecho

Presentación del libro Los juicios orales en el estado de Morelos. Las nuevas prácticas. Fotografía: Cassandra Meléndez| Gaceta Políticas
El reciente amparo otorgado a Diego Cruz, el joven implicado en el abuso sexual de la menor de edad Daphne Fernández, por el juez Anuar González Hemadi, es un hecho que genera diversas interrogantes sobre las decisiones de los impartidores de justicia.
En este contexto, el libro Los juicios orales en el estado de Morelos. Las nuevas prácticas, de Angélica Cuéllar Vázquez, es oportuno para explicar desde la sociología por qué un juez toma una decisión u otra y cómo llega a ésta, señaló el profesor Iván García, durante la presentación de la obra.
Para comprender lo que ocurre con las decisiones de los jueces, se necesita más que una evaluación jurídica, “el derecho no puede explicar por qué un juez toma una decisión de este tipo, sin embargo la sociología sí”, reafirmó.
La obra de la doctora Cuéllar es un libro que motiva a grandes reflexiones, un trabajo en conjunto que habla sobre los juicios orales y el fuero judicial, en un país como el nuestro donde hay una gran brecha entre lo que está en la ley escrita y lo que sucede en la realidad, un escenario de gran impunidad.
Comentó que otro aporte del trabajo es hablar con una perspectiva de derechos humanos como una norma jurídica y no sólo como una carga política, un nuevo elemento que se está trabajando desde la sociología jurídica.
Un comentario más a la obra lo realizó la doctora Karina Ansolabehere, quien señaló que los aportes académicos del libro son importantes porque propone una aproximación al derecho como construcción simbólica, esto invita a romper una mirada del derecho como reglas que operan como límites a los actores, “el derecho como un proceso de construcción”.
“La autora se vale de conceptos muy arraigados en la teoría sociológica y desde ahí teje mediaciones para identificar de qué manera estos conceptos pueden ayudar a entender los cambios en el sistema judicial”, comentó.
La reciente reforma al sistema de justicia penal en el país está signada por dos preocupaciones: el aumento de la inseguridad y la violencia y la demanda de protección de los derechos humanos de la víctima y el victimario; en este escenario, dijo, la autora sitúa su análisis en las recientes reformas. En el caso de Morelos, identifica que hay una preocupación por el respeto a los derechos humanos, el uso de la oralidad y el surgimiento de actores con un papel más protagonista como los defensores públicos.
Para finalizar, Angélica Cuéllar mencionó que es muy importante que los científicos sociales se apropien del derecho porque no solamente es relevante una construcción desde la ley sino también la construcción social.
Sobre la modalidad de los juicios orales en Morelos comentó que en este nuevo modelo acusatorio los operadores jurídicos viven una transición, pues adaptan y adoptan prácticas del viejo y nuevo sistema.
El punto de la oralidad, señaló, es fundamental, ya que ésta obliga al juez a estar presente en las audiencias, a verle la cara al imputado y a la víctima. Este sistema hizo que “los actores fueran visibles”. Una ganancia más es que los derechos humanos estén incorporados y que se hagan valer como una norma, expresó.