Retos para la megalópolis
Por Claudia Daniela Reséndiz Quiroz

Ciudad de México. Foto: Recreo Viral.
La Ciudad de México es un cúmulo de relaciones políticas, económicas, sociales y culturales. El urbanismo la ha convertido en una megalópolis con carencias y deficiencias como la falta de coordinación, desindustrialización, inseguridad, crecimiento de economía informal y sobre todo inequidad y desigualdad en servicios básicos (acceso a vivienda, agua, comida, transporte, espacios públicos, etcétera).
Esto se expuso en el segundo foro La Ciudad de México a debate, organizado por el Centro de Estudios Sociológicos (CES) de la Facultad, el 23 y 24 de marzo pasado.
En la mesa de diálogo conformada por los profesores Christian Ascencio, docente del CES, así como Karla Valverde y Arturo Chávez, adscritos al Centro de Estudios Políticos, se abordaron temas relacionados con la mejora del país. En este tenor, los catedráticos señalaron que la desigualdad se ha intensificado con el paso de los años; la mayor parte del producto bruto se reparte a un sector cada vez menor de la población, y el cambio en la política económica de México es un proceso lento con mínimos resultados.

Christian Ascensio Martínez. Foto: Kevin Gutiérrez
Culturalmente, puntualizaron los ponentes, las familias mexicanas priorizan una propiedad propia ante servicios públicos de calidad, pues no tener que rentar les genera tranquilidad y seguridad. La falta de áreas verdes en la ciudad también es un grave problema al que se le da poca importancia; por ello se han implementado programas medioambientales que buscan desarrollar soluciones y concientizar a la población.
Afirmaron que los medios de comunicación tienen un papel relevante en la mentalidad social, y que periodistas comerciales y con fines de lucro, a menudo se apropian de la información científica para manipularla, dejando una audiencia sin elementos críticos y reflexivos. Aún más, indicaron que la omisión de opiniones con respecto a la desigualdad y sus consecuencias en la CDMX, dificulta el debate inteligente y la resolución de problemas; no obstante, añadieron, para un diálogo que produzca cambios y resultados hace falta un periodismo de calidad que genere duda, razonamiento, pensamiento crítico y toma de decisiones.
En este marco, los científicos sociales son clave para hacer de la Ciudad un lugar digno, vivible y con justicia. Los ejes para la verdadera transformación son la honestidad, el interés, el cuestionamiento, la democracia y la participación social, concluyeron.