¿Qué sabemos desde la academia sobre la lucha libre?
Por Tania Lucero Jiménez Cárdenas

Lucha libre. Foto: CMLL.
¿Qué sabemos desde la academia sobre la lucha libre?, cuestionó la doctora Patricia Celis, antropóloga de la Facultad, quien al participar en el Quinto coloquio: lucha libre y su relación con el turismo, resaltó que éste es uno de los temas de máxima discusión, pero dentro de las ciencias sociales es un asunto que poco se estudia, aun cuando es una práctica que forma parte del proceso de apropiación cultural en México, a la cual se han incorporado narrativas locales e importantes símbolos asociados a la construcción de los personajes que se presentan en escena.
Celis definió a la lucha libre como un performance cultural que da cuenta de hechos que pasan en la vida cotidiana; es una actividad que se inserta, como un fenómeno complejo y cambiante, en una industria cultural y creativa contemporánea, en la que una de sus características fundamentales son los exponentes, las máscaras, las narrativas, las arenas, el desarrollo de dinastías (familias luchistas), el exotismo y la diversidad.
Los participantes “no sólo son deportistas, son personas que trabajan a partir de la lucha, que viven y necesitan ser perseverantes para hacer frente a las necesidades de este arte; seres humanos que se preparan a diario para realizar una función que, como espectadores, disfrutamos”, enfatizó la académica de la FCPyS.
En adición a lo anterior, la fotógrafa y especialista en retratar a la lucha libre, Daniela Herrerías, subrayó que no hay un apoyo que garantice el mantenimiento de los grupos de lucha libre al interior de la República Mexicana, al tiempo que se preguntó, a manera de reflexión: ¿qué condiciones podemos generar nosotros, como asesores culturales de lucha libre, para dar mayor visibilidad a promotores pequeños que van creando eventos de lucha libre?

Luchador «Calibus». Foto: Darren García.
Jalil Azcary del Carmen, maestro en Derecho, agregó a la discusión el concepto de turismo cultural, como punto de partida para dar cuenta del incremento de asistencia de personas extranjeras en las arenas donde se efectúan las luchas; es decir, evaluó el impacto de este deporte en la atracción de visitantes y su contribución al turismo cultural de la Ciudad de México, así como al ámbito económico y social, ya que son personas que antes de entrar a los establecimientos suelen comprar una máscara, entre otras cosas.

Asistentes al evento portando máscaras. Foto: Darren García.
El ponente, quien también ha sido servidor público de la Comisión de Apelación y Arbitraje del Deporte, cerró esta conferencia, organizada con motivo del Día nacional de la lucha libre, subrayando que esta práctica se debe observar como una muestra cultural que necesita ser aprovechada por las instituciones gubernamentales de la cultura y el turismo.