La gobernanza global no detiene las amenazas híbridas de hoy
Por Alfredo Bucio

Foto: acami.es
“Nuevas dimensiones del conflicto» fue el título del panel en el cual Ricardo Pascoe Pierce, embajador de México en retiro, destacó el debilitamiento de las estructuras multilaterales frente al resurgimiento de intereses geopolíticos nacionales. Asimismo, enfatizó que las potencias tradicionales ya no controlan de forma unificada el tablero global, lo que ha generado una fragmentación en la toma de decisiones colectivas.
En esta sesión, que reunió a destacados especialistas en relaciones internacionales, seguridad y derechos humanos, Javier Oliva Posada, del Centro de Estudios Políticos de la FCPyS, abordó la transformación de los actores de los conflictos e hizo hincapié en que hoy ya no sólo se trata de Estados, sino también de empresas trasnacionales, grupos armados no estatales y organizaciones criminales. En este tenor, afirmó que la gobernanza global enfrenta una crisis al no poder contener amenazas híbridas que combinan violencia física, desinformación y vulneración de garantías individuales.

Yadira Gálvez, Ricardo Pascoe, Frida Soto, Javier Oliva y Miguel A. Ramírez. Foto: Miguel Ángel Silva.
La internacionalista Yadira Gálvez Salvador centró su participación en el impacto de los conflictos armados en poblaciones civiles, especialmente en mujeres, niñas y comunidades desplazadas. Enfatizó que las nuevas formas de violencia afectan la seguridad humana de manera diferenciada y requieren respuestas con enfoque de género y derechos humanos. Además, criticó la militarización como respuesta generalizada frente a crisis complejas, subrayando la necesidad de políticas públicas integrales y sensibles a contextos locales.
Miguel Adrián Ramírez González, representante del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), expuso el rol humanitario que desempeñan organizaciones internacionales de salud ante la escalada de conflictos regionales. Explicó que los conflictos en el mundo conllevan ataques a infraestructuras civiles, desplazamientos forzados y la falta de acceso a ayuda humanitaria, por lo que el derecho internacional humanitario es imprescindible.